LEGADO EN LOS HUESOS.
DOLORES REDONDO.
EDITORIAL DESTINO.
549 PÁGINAS.
SEGUNDA ENTREGA DE LA TRILOGÍA DE BAZTÁN.
Una novela impactante muy bien lograda. Estructura múltiple con narrador omnisciente.
La escritora combina la fantasía con el género negro. Amaia Salazar es un personaje principal impecable, que logra empatizar con el lector, aunque hay momentos que la rechazas por su soberbia y perfección. No sabe delegar en su equipo y parece que si ella no controla todo no se fía del resto.
El personaje de James, el marido de la inspectora Salazar, es bastante innecesario. Hace de hombre florero y es insulso. Le falta fuerza al personaje y es plano. En este aspecto la escritora ha fallado, según mi punto de vista como lectora.
La mezcla de fantasía y novela negra no acaba de gustarme. Los poderes sobrenaturales y las supuestas dotes de clarividencias de la inspectora ayuda a resolver el caso y eso, a mi modo de ver, es hacer trampa. Por esos hechos, no le otorgaría a este tipo de novelas el nombre de género negro.
Muy bien documentada y utiliza un lenguaje adecuado cuando relata los pasajes criminalísticos y científicos. Hay narraciones que no son necesarias, algunos pasos en la investigación que añaden páginas de más: diálogos, reflexiones de personajes irrelevantes...
El ritmo de la novela es trepidante, con giros que sorprende al lector y lo mantiene atento.
Recomiendo leer la definición que se hace sobre la fidelidad, muy interesante, en la página 320, último párrafo, y 321. Viene a colación de la atracción que siente Amaia por el juez Markina.
"Cuando uno decide que ama a otro tanto que renuncia a todos los demás no se queda ciego ni se vuelve invisible, sigue viendo y le siguen viendo. No tiene ningún mérito ser fiel cuando lo que vemos no nos tienta o cuando nadie nos mira..."
Como conclusión, diré que es una novela de sobresaliente alto. 100% recomendable.
DOLORES REDONDO.
EDITORIAL DESTINO.
549 PÁGINAS.
SEGUNDA ENTREGA DE LA TRILOGÍA DE BAZTÁN.
Una novela impactante muy bien lograda. Estructura múltiple con narrador omnisciente.
La escritora combina la fantasía con el género negro. Amaia Salazar es un personaje principal impecable, que logra empatizar con el lector, aunque hay momentos que la rechazas por su soberbia y perfección. No sabe delegar en su equipo y parece que si ella no controla todo no se fía del resto.
El personaje de James, el marido de la inspectora Salazar, es bastante innecesario. Hace de hombre florero y es insulso. Le falta fuerza al personaje y es plano. En este aspecto la escritora ha fallado, según mi punto de vista como lectora.
La mezcla de fantasía y novela negra no acaba de gustarme. Los poderes sobrenaturales y las supuestas dotes de clarividencias de la inspectora ayuda a resolver el caso y eso, a mi modo de ver, es hacer trampa. Por esos hechos, no le otorgaría a este tipo de novelas el nombre de género negro.
Muy bien documentada y utiliza un lenguaje adecuado cuando relata los pasajes criminalísticos y científicos. Hay narraciones que no son necesarias, algunos pasos en la investigación que añaden páginas de más: diálogos, reflexiones de personajes irrelevantes...
El ritmo de la novela es trepidante, con giros que sorprende al lector y lo mantiene atento.
Recomiendo leer la definición que se hace sobre la fidelidad, muy interesante, en la página 320, último párrafo, y 321. Viene a colación de la atracción que siente Amaia por el juez Markina.
"Cuando uno decide que ama a otro tanto que renuncia a todos los demás no se queda ciego ni se vuelve invisible, sigue viendo y le siguen viendo. No tiene ningún mérito ser fiel cuando lo que vemos no nos tienta o cuando nadie nos mira..."
Como conclusión, diré que es una novela de sobresaliente alto. 100% recomendable.
Hola. Gracias a los blog estoy leyendo libros muy buenos. Buscaré este. y seguro que ser´un placer leer. Gracias por tu recomendación.
ResponderEliminarUn abrazo.
Josefa, gracias a ti por tu visita. Tú también nos puedes recomendar tus lecturas favoritas.
ResponderEliminarOtro abrazo.